Cómo cambiar una válvula de seguridad sin vaciar el termo eléctrico

Termo eléctrico con valvula de seguridad ya instalada.
Termo eléctrico con valvula de seguridad ya instalada.

Cómo cambiar una válvula de seguridad sin vaciar el termo eléctrico.

Valvula seguridad termo eléctrico
Valvula seguridad termo eléctrico

La válvula de seguridad es un elemento imprescindible para el correcto funcionamiento y la seguridad de un termo eléctrico. Su función es liberar el exceso de presión y temperatura del agua que se calienta en el depósito, evitando así posibles daños o explosiones. Sin embargo, con el paso del tiempo, la válvula puede deteriorarse o averiarse, provocando fugas o goteos de agua que pueden afectar al rendimiento y la eficiencia del termo.

Si detectas que tu válvula de seguridad está dañada o defectuosa, lo más recomendable es cambiarla cuanto antes por una nueva. Pero ¿cómo hacerlo sin tener que vaciar el termo eléctrico? A continuación, te explicamos los pasos que debes seguir para realizar esta tarea de forma rápida y sencilla, sin necesidad de vaciar el depósito ni desperdiciar agua.

Detalle del interior de una válvula de seguridad
Detalle del interior de una válvula de seguridad

Pasos para cambiar la válvula de seguridad sin vaciar el termo eléctrico

Antes de empezar, debes tener en cuenta algunas precauciones y medidas de seguridad:

Desconecta el termo eléctrico de la corriente y cierra la llave de paso del agua fría que alimenta al termo.

 

Espera a que el agua se enfríe lo suficiente para evitar quemaduras. Puedes abrir un grifo de agua caliente para comprobar la temperatura y aliviar la presión del circuito.

 

Prepara un cubo o recipiente para recoger el agua que pueda salir al desmontar la válvula.

Para que no se te vacíe el termo es muy importante tener todos los grifos cerrados de esta manera al no entrar aire al termo este no se vaciara.

 

Utiliza herramientas adecuadas y guantes protectores para manipular la válvula.

Si no te sientes seguro o no tienes experiencia en este tipo de trabajos, lo mejor es que contactes con un profesional cualificado que pueda hacerlo por ti.

 

Una vez que hayas tomado estas precauciones, puedes proceder a cambiar la válvula de seguridad siguiendo estos pasos:

1.     Localiza la válvula de seguridad en el termo eléctrico. Normalmente, se encuentra en la parte inferior del depósito, junto a la entrada de agua fría. Tiene forma de T y suele tener una palanca o un tornillo rojo en su extremo.

2.     Afloja la tuerca que sujeta la válvula al tubo de entrada de agua fría con una llave inglesa o una llave ajustable. Ten cuidado de no dañar el tubo ni la rosca al hacerlo.

3.     Retira la válvula con cuidado y deja que salga el agua que pueda quedar en el tubo, no te preocupes porque es normal no debería salir mucha agua. Recógela con el cubo o recipiente que hayas preparado previamente.

4.     Limpia bien la rosca del tubo con un trapo o papel absorbente para eliminar cualquier resto de suciedad o cal que pueda dificultar el ajuste de la nueva válvula.

5.     Coloca una cinta de teflón o una pasta selladora en la rosca del tubo para asegurar una buena estanqueidad y evitar fugas.

6.     Enrosca la nueva válvula en el tubo, asegurándote de que quede bien alineada y orientada hacia abajo. Aprieta la tuerca con la llave sin forzar demasiado para no dañar la rosca ni deformar la válvula.

7.     Abre la llave de paso del agua fría y comprueba que no haya fugas ni goteos en la conexión. Si los hay, cierra la llave y vuelve a apretar la tuerca hasta que se solucione el problema.

8.     Conecta el termo eléctrico a la corriente y espera a que se caliente el agua. Abre un grifo de agua caliente y verifica que salga agua sin problemas y que la presión sea adecuada.

9.     Prueba el funcionamiento de la válvula abriendo su palanca o tornillo rojo y observando si sale agua por su salida. Si es así, significa que está funcionando correctamente y que libera el exceso de presión cuando es necesario. Cierra la palanca o tornillo rojo y comprueba que no haya fugas ni goteos.

¡Y ya está! Has cambiado la válvula de seguridad sin vaciar el termo eléctrico. Ahora puedes disfrutar de tu agua caliente con tranquilidad y seguridad. Recuerda revisar periódicamente el estado de la válvula y cambiarla cada 5 años o cuando notes algún síntoma de mal funcionamiento.

Consejos para mantener la válvula de seguridad en buen estado

Para alargar la vida útil de la válvula de seguridad y evitar averías o fugas, te recomendamos que sigas estos consejos:

Instala un reductor de presión en la entrada de agua fría del termo eléctrico si la presión del agua es superior a 3 bares. Así evitarás que la válvula se active innecesariamente y se desgaste más rápido.

 

Limpia la válvula de seguridad una vez al año para eliminar los posibles depósitos de cal o suciedad que puedan obstruir su salida o impedir su cierre. Para ello, abre y cierra su palanca o tornillo rojo varias veces hasta que salga agua limpia.

 

No manipules ni fuerces la válvula de seguridad si no es necesario. Déjala en su posición normal y solo ábrela para comprobar su funcionamiento o para purgar el circuito.

 

Si observas que la válvula gotea constantemente o que sale mucha agua por su salida, no intentes repararla ni taparla. Lo más probable es que esté averiada o que haya un problema de presión o temperatura en el termo eléctrico. En ese caso, lo mejor es que cambies la válvula por una nueva o que contactes con un profesional que pueda solucionarlo.

 

Esperamos que este blog te haya sido útil y que hayas aprendido cómo cambiar una válvula de seguridad sin vaciar el termo eléctrico. Si te ha gustado, compártelo con tus amigos y familiares y déjanos un comentario con tu opinión o sugerencia. ¡Gracias por leernos! 😊

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